Nunca es tarde para empezar. "Las cosas de la caja", sí. Es que yo soy muy de cajas. Me gustan las cosas ordenadas, dentro de un desorden, y las cajas son fantásticas para eso. Tengo varias. Esta en concreto contiene relatos. Cortos. La dosis justa de texto para, por ejemplo, leer uno cada noche antes de acostarse (como el que se toma el vaso de leche o el ansiolítico) o cada mañana (como quien se bebe el zumo de naranja). O a demanda, que dicen los galenos.
Translate
domingo, 16 de enero de 2011
Inicio
Nunca es tarde para empezar, ¿no creen? Eso mismo me he dicho yo.
"Las cosas de la caja", sí, el mismo nombre que una obrita que está a punto de nacer al mundo virtual (podríamos, si fuéramos matronas o ginecólogos, decir que han empezado las contracciones). Pero es que yo soy muy de cajas. Me gustan las cosas ordenadas, dentro de un desorden. Quiero decir con esto que no soy una ordenada compulsiva pero sí me gusta tener un sitio en el que recoger lo disperso. Y las cajas son fantásticas para eso.
Tengo varias.
Ésta en concreto contiene relatos. Cortos. La dosis justa de texto para, por ejemplo, leer uno cada noche antes de acostarse (como el que se toma el vaso de leche o el ansiolítico) o cada mañana (como quien se bebe el zumo de naranja). O cuando le apetezca.
En fin, allá vamos.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Si si, de hecho mi cajita la tienes llena de mimos y achuchones variados...Me gusta lo de la 'boite'...es de nuestra época.
ResponderEliminarFeliz singladura, Fefa
Ana Karam
Gracias, prenda. Con gente como tú seguro que llego a buen puerto.
ResponderEliminarBesos (y achuchones)
Muy bien, Vichoff, tu entrada en la "blogosfera"; ya verás como gestionar un blog es la mar de fácil.
ResponderEliminarAprovecho para comunicarte que "lo tuyo" va bien; algo retrasado, es cierto, pero es que el Sr. Conejo está de temporada alta :-)))
También te mando un beso y empiezo a escudriñarte.
:-*