Un poco (ciento veinte palabras) de ciencia ficción.
Imagen tomada de www.telefonosantiguos.es
PROBLEMAS DE COMUNICACIÓN
Aquellos seres tenían una complicada forma de comunicarse. Emitían
sonidos ininteligibles y, ante todo, indescifrables. Sobre un
cuerpo desproporcionado y un cuello casi inexistente, la cabeza, diminuta,
mostraba un rostro, casi desagradable de puro tenso, que a veces arrugaban en
gestos histriónicos. Su comportamiento era casi tan extraño como su sistema de
comunicación, por no hablar de sus rudimentarios medios de transporte.
Sin embargo, no se desanimó. Tuvo que armarse de paciencia,
recurrir a todos sus conocimientos sobre criaturas galácticas y recordar claves
y sistemas de descodificación que ya casi había olvidado pero, después de
varias jornadas de intenso trabajo y de mucho esfuerzo, encontró el modo de entenderse con ellos y hacerles llegar su mensaje:
“Mi caaaaaaaasa, teleeeeeeéfono…"
Así que el instrumento de tortura, digo de comunicación :-), es universal. Soy un poco borde, lo sé. Sigo empeñado en que uno se puede comunicar en silencio. Al fin y al cabo eso es escribir, ¿no?. También. Todavía no he conseguido desconectar mi ordenador de la línea telefónica. Luego me quejo :-) Sigo empeñado en encontrar el modo de hablar sin sonidos. Sé que existe :-)
ResponderEliminarMagnífico micro, divertido e inteligente.
ResponderEliminarY es que cuando se cambia la visión etnocéntrica o se mira desde el otro lado, todo es otra cosa :)
Mil besos.