...sobre todo lo mía. ¿Pues no se me olvida lo más importante? Y lo de "lo más importante" no es una exageración, es que es (excepción hecha del nacimiento de mis hijas) lo más importante que me ha pasado en la vida. ¡Que tengo un libro, por Dior, un libro de carne y hueso! Quiero decir un libro publicado, con su portada y su páginas numeradas y su todo; un libro de esos que se pueden colocar en un estante (éste, además, como es bastante grueso, puede ayudar a que los colindantes no resbalen y empujen esa figurita de porcelana tan delicada que tanto nos gusta).
No es mío solo. Como diría mi admirada Mafalda, "lo tengo en condominio" con un señor de Murcia. Que lo escribimos a medias, vamos. El señor de Murcia se llama Francisco González Marín, es amigo y escribe... cómo lo diría yo... escribe de P(ost) M(eridiem). Y ha hecho un blog donde, de momento, ha colgado algunos discursos de presentación, a la espera de más aportaciones.
El blog lo añado ahora mismo a mi lista y el libro os lo presentan un poco en este enlace:
http://www.edicionesatlantis.com/catalogo/21/612/
Está distribuído en "El Corte Inglés" y en "La casa del Libro" aunque mi consejo es que vayais a vuestro librero de cabecera y se lo encargueis.
Pues eso, que he tenido un libro. Y como ya hace tiempo planté dos hijas, me pongo ahora mismo a escribir el árbol.
Edito: ¿lo veis? ¿Veis lo mal que está mi cabeza? ¡Dije lo del libro hace dos días, cinco entradas más abajo! Me voy a buscar un psiquiatra de urgencia.
¡Ninaaaaaaaaaaaaaaaaaaa, ninaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa!
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